Mi primera experiencia real. ¡¡Dios..Como esta el Servicio!!

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Alba-malagueña
I Conejito
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Mi primera experiencia real. ¡¡Dios..Como esta el Servicio!!

Mensajepor Alba-malagueña » Sab Sep 13, 2014 14:27

Hace mucho que no relato alguna de mis fantasías ya logradas, cuando recuerdo determinadas escenas vividas, se me pone la piel de gallina, del morbo que aun desprenden en mi memoria.
Desempolvando unos cuantos relatos que merecen su mención en el foro, comenzare este, con una gran sonrisa dibujada en mi rostro.

Siempre desde niña, me han llamado la atención, Las amas de cría, Las criadas de la gente adinerada o "La maruja" (como comúnmente llamamos en Andalucía "Una Mari"... igual a...mujer de su casa, o sea, sumisa vocacional). No me preguntéis porque, podría ser por esos uniformes, que llevan algunas, o tal vez, por el hecho de que algunas se encaman con sus señores o señoras, véanse líos, con empleados uniformados, jardineros, chófer, fontaneros...

En mi fantasía, jugar el rol, de una camarera de habitaciones y el someterme a un cliente, al momento, de solicitar un servicio especial, es la pauta de este relato.

Este invierno pasado, cuando vine de nuevo a visitaros, me llamo un amigo que deseaba verme en un hotel por la zona de la Calzada, y deseando, que le plantease esta fantasía.

Me prepare de una forma bastante sugerente....me puse uno de los tantos disfraces que tengo, pero ha este, le tengo un especial aprecio, fui como una criada francesa, sabéis como iban estas, noooooo, trajecito negro de red, escotado, con tirantes finos y atado a la espalda; a la altura del lazo del mandil (delantal) blanco muy muy cortito, insinuando, mis braguitas de red negras con encajitos en blanco al igual que mi uniforme, son descapotadas, jajajaja, explico...solo dos tiritas que marcan mi dulce golosina, sin telita en sus bajos, mostrando mi sexo al natural, botas altas hasta mitad del muslo de látex, guantes blancos cortos y por supuesto mi cofia.... llevaba el cabello recogido en una cola alta, mi abrigo... cubría tan soberana sorpresa. Cuando llegue a la planta donde se encontraba su habitación, encaminándome por el pasillo, me quite el chaquetón e introduje la mano en el bolsillo, saque la cofia que había guardado y ya colocada en mi cabeza, delante de su puerta, doble sutilmente el chaquetón sobre mi antebrazo y coloque sobre mi mano, la toalla que había dejado el huésped, toque suavemente la puerta, toc, toc, toc......servicio de habitaciones, exclame.

El huésped, raudo me abrió la puerta, invitándome con un gesto de su mano a pasar, buenas noches Sr., servicio de habitaciones, buenas noches., pase por favor, me dijo él.
Me han dado la orden, desde la lavandería, de entregarle su chaquetón y la toalla que necesitaba, si bien... es así, ommmmmmmm Alba, leo en su distintivo, si Sr., así me llamo. Deje el abrigo en el armario, mientras finalizo, unos temas de trabajo en mi IPhone y coloque la toalla en el servicio, a la su salida señorita, sugirió.

Emboce, una picara sonrisa y así lo hice, moviendo mis caderas penduleantes, me acerque y abrí el armario, me incline un poco para coger una percha y así, percatase mi entrepierna.....ummmm, pensé, la visión de mi culo y el entrever mí dulce tesoro expuesto a sus ojos, le inyectarían de lujuria.
La toalla doblada en mi mano, fue como una correa que le atrajo a donde yo le quería llevar, siguió mis pasos hacia el baño y desconectando su móvil, se quedo apoyado en la puerta observándome, Sr...le dije, le importa que repase los bajos del lavabo, no esta bien limpio, dije, mientras me arrodillaba ante sus pies, con mis guantes, frote las imaginarias gotas, que habían en el suelo, a lo que él , me sujeto la cara con una mano, intentando con la otra que me levantase del piso, pero yo insistí, Sr...No deseo una queja en mi turno de trabajo!!! Como desees, me respondió.

Regrese, a posicionarme de rodillas, ante él, mientras.... frote el suelo, sus zapatos, su pantalón, con mis guantes inmaculados, él...erguido, miraba mi culo, mis bragas tras el lazo del mandil y mis botas de látex.., bonitas vistas, que uniforme mas curioso y picante, lleváis en este hotel, musito, tengo que volver a alojarme a mi vuelta por Gijón, risas.........Disculpe le conteste. Tiene una manchita en su pantalón, el tamaño de su miembro, se insinuaba tras esté.
Sujetando mi coleta, tiro de ella y me hizo alzar la cabeza, para besar mi boca salvajemente, me escupió dentro de ella , a la par, que con su mano libre, bajaba la cremallera, sacando su monumental miembro erecto e introduciéndolo en mi boca, logre hacerle, una garganta muy profunda ¡¡¡Chupa cabrona!!! Hazme una limpieza de bajos, grito imperioso. Si, Sr... Asentí con mi cabeza, saco su miembro de mi boca, con vehemencia e intensidad, exclamo ¿No te oigo puta, que vas a limpiarme, para que te he llamado?...respondí...Estoy aquí, para hacerle una limpieza de bajos, Sr.

Bien... veo que lo has entendido, lo que pase en esta habitación, se queda aquí zorra, me encantas nena. Llene de nuevo, con su miembro mi boca y haciendo un gesto con mi mano, dirigí su mirada a través del cristal del lavabo, mi sensual mamada, era buscada por sus ojos, encontrándose con los míos al reflejo del cristal, mi boca estaba sedienta de su ser.....el grosor era considerable y muy apetecible, deleite mi lengua, succionando, ensalivando cada centímetro de él, sus huevos, eran como bolsas de te, cargados de esencia para mi....ummmmmmmmmmmmmmm.
Los alce y pase la punta de mi lengua por su escroto, umm, ceñí sus bolsas de te... en mi boca, los succione, los ensalive, Diossss, que gusto me daba.

Sus piernas, ya flaqueaban ante mi, así que, me retiro su miembro, no sin antes, volver a escupirme en ella.
Se coloco tras de mi, mientras me ordenaba, ven aquí, al lado de la bañera, en cuadrupedia, le alcance la toalla, que había dejado antes y la coloco en el suelo, para que me pusiera sobre ella, se sentó en el taburete y cogió el mango de la ducha, ¿Que va a hacer, Sr.? pregunte.

¡¡¡Calla zorrita, quiero mojar tu coñito!!! El agua, se deslizaba por mis nalgas, calando la poca tela de mis braguitas, goteando sobre mis botas de látex…¡¡¡Como me pones, que culo, que coño, que botas!!!, repetía. Con mis agujeros ya húmedos, dejo el mango de la ducha y me introduce tres dedos, de golpe. Ohhhhhhhhh emití en tono sutil, ¿Te gusta zorra?, suave replique Sr.

Me pones y no voy a tener piedad contigo, hoy mando yo. Otro dedo en mi culo metió, tras explorarlo, me hizo lamerlos, a la par, que él... también lo hacia.
Tras saborear sus dedos, dio protagonismo a su lengua, entre mis piernas, exploro cada rincón, cada agujero, cada centímetro de mí.

Se puso de pie y me levanto del suelo, sus brazos me cogieron a horcajadas y colocándose delante del espejo, contemplo mi culo, bien abierto. Mojo sus dedos en el lavabo, empalándome con ellos... Me llevo a la cama y me coloco sobre ella, sin sacar sus dedos, empezó a lamer mi clítoris, con largas pasadas desde mi dulce agujero; a mi dulce golosina, una, dos, tres, cuatro veces, succiono y mordisqueo mi clítoris con sus labios y dientes, ohhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhh, increíble, Sr....que lengua tiene, confesé ¡¡¡Que coñito tienes Alba, que gusto para mis sentidos, el tenerte así!!!....exclamo.

Tras saciar su boca, me levanto de la cama y me sentó ahora frente al ventanal de la habitación, en un silla de estudio, que estaba ya posicionada, me sentó sobre esta, ahora era él, se encontraba de rodillas ante mi, me sujeto los pies, mientras con su lengua lamia mis fantásticas botas, sus manos enrollaban el látex hasta bajarlas a mis tobillos, besaba mis piernas, tocando su miembro salvajemente ante mis ojos. Sr... Me encanta verlo así, me gusta ver, como se toca su miembro, como se masturba para mí. ¡¡¡Si, zorrita!!!... Eso hago, ponerla bien durita para ti, te la voy a clavar hasta el fondo, ¿Sabes, porque te he sentado aquí?...no Sr.... ¿Porque?, pregunte. Porque quiero, que la gente que pase por la calle nos vea follar. Deseo que admiren tu cuerpo y vean como te follo. Ummm, sonreí, me encanta la idea Sr.

Me quito las botas y con el látex de la perneras de estas, me ato los antebrazo a a los de la silla, el reía a carcajadas, mientras me azotaba con su miembro la boca, chupa, lame, como solo tu sabes nena.
Sus manos, ahora, recorrían mi espalda, jugueteando con los tirantes del uniforme, deslizo la tela del escote, sacando mis pechos, recogía entre sus dedos, los pezones, pellizcando y escupiendo sobre ellos, metió su verga empalmada ¡¡¡Me voy a hacer una cubana, con tus tetazas, golfa....que polvo tienes!!! dijo.
Yo, solo miraba su cara, el mordisqueo de sus labios, su sonrisa malévola, su pasión...Que gusto...Usted, si sabe Sr.. conteste.

Inclino un poco la silla y la recostó sobre la pared, sujetando y alzando mis nalgas, me metió su miembro, de un golpe, moviendo con rapidez su pubis, sus testículos votaban sobre mi culo, dándome un placer inenarrable, casi perdí el sentido, solo deseo que se sacie de mi, Sr....Eso hago, eres mía.....

Jadeante, gritaba… ¿Deseas mi leche, putita? Te la daré en tu cara, no Sr... Eso noooo. ¿Dónde la quieres, sino? En mis tetas, en mis piernas, en mis nalgas, pero en mi cara noooo, conteste y de esta manera, lo hizo. Me marco entera, desde la cara hasta el cuerpo, que fantástica corrida, espectacular, jamás había visto una tan exagerada, ves Alba, estaba bien cargadito para ti, ya te he marcado, he marcado mi territorio, comento. Mientras me besaba apasionadamente, sus manos me desataron, dejando mis manos por fin libres, para acariciar su cara, su cabello, sus labios, su sexo.

Me calce mis botas, una sonrisa dibujada y una mirada sostenida y silenciosa, fue nuestra despedida. Prometí escribir este relato, en homenaje, a mi amigo por mi fantasía lograda, al regalar esta experiencia; dejo plasmado nuestro momento, leeremos este relato, quien sabe, tal vez como un anónimo se lo lee a un amigo y en el recuerdo vivido, solo nosotros sabremos lo que ha pasado, lo que hemos vivido y sentido en nuestra piel.

Con vuestro permiso, dejad que me despida de él, con estas palabras.....Sin tí, no hubiese sido posible, siempre estarás en mi mente, gracias.

Besotes golosos, deseo que os guste, tanto como a mi. Alba - malagueña.

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Lunavalencia
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Re: Mi primera experiencia real. ¡¡Dios..Como esta el Servic

Mensajepor Lunavalencia » Lun Sep 15, 2014 00:06

Alba-malagueña escribió:Hace mucho que no relato alguna de mis fantasías ya logradas, cuando recuerdo determinadas escenas vividas, se me pone la piel de gallina, del morbo que aun desprenden en mi memoria.
Desempolvando unos cuantos relatos que merecen su mención en el foro, comenzare este, con una gran sonrisa dibujada en mi rostro.

Siempre desde niña, me han llamado la atención, Las amas de cría, Las criadas de la gente adinerada o "La maruja" (como comúnmente llamamos en Andalucía "Una Mari"... igual a...mujer de su casa, o sea, sumisa vocacional). No me preguntéis porque, podría ser por esos uniformes, que llevan algunas, o tal vez, por el hecho de que algunas se encaman con sus señores o señoras, véanse líos, con empleados uniformados, jardineros, chófer, fontaneros...

En mi fantasía, jugar el rol, de una camarera de habitaciones y el someterme a un cliente, al momento, de solicitar un servicio especial, es la pauta de este relato.

Este invierno pasado, cuando vine de nuevo a visitaros, me llamo un amigo que deseaba verme en un hotel por la zona de la Calzada, y deseando, que le plantease esta fantasía.

Me prepare de una forma bastante sugerente....me puse uno de los tantos disfraces que tengo, pero ha este, le tengo un especial aprecio, fui como una criada francesa, sabéis como iban estas, noooooo, trajecito negro de red, escotado, con tirantes finos y atado a la espalda; a la altura del lazo del mandil (delantal) blanco muy muy cortito, insinuando, mis braguitas de red negras con encajitos en blanco al igual que mi uniforme, son descapotadas, jajajaja, explico...solo dos tiritas que marcan mi dulce golosina, sin telita en sus bajos, mostrando mi sexo al natural, botas altas hasta mitad del muslo de látex, guantes blancos cortos y por supuesto mi cofia.... llevaba el cabello recogido en una cola alta, mi abrigo... cubría tan soberana sorpresa. Cuando llegue a la planta donde se encontraba su habitación, encaminándome por el pasillo, me quite el chaquetón e introduje la mano en el bolsillo, saque la cofia que había guardado y ya colocada en mi cabeza, delante de su puerta, doble sutilmente el chaquetón sobre mi antebrazo y coloque sobre mi mano, la toalla que había dejado el huésped, toque suavemente la puerta, toc, toc, toc......servicio de habitaciones, exclame.

El huésped, raudo me abrió la puerta, invitándome con un gesto de su mano a pasar, buenas noches Sr., servicio de habitaciones, buenas noches., pase por favor, me dijo él.
Me han dado la orden, desde la lavandería, de entregarle su chaquetón y la toalla que necesitaba, si bien... es así, ommmmmmmm Alba, leo en su distintivo, si Sr., así me llamo. Deje el abrigo en el armario, mientras finalizo, unos temas de trabajo en mi IPhone y coloque la toalla en el servicio, a la su salida señorita, sugirió.

Emboce, una picara sonrisa y así lo hice, moviendo mis caderas penduleantes, me acerque y abrí el armario, me incline un poco para coger una percha y así, percatase mi entrepierna.....ummmm, pensé, la visión de mi culo y el entrever mí dulce tesoro expuesto a sus ojos, le inyectarían de lujuria.
La toalla doblada en mi mano, fue como una correa que le atrajo a donde yo le quería llevar, siguió mis pasos hacia el baño y desconectando su móvil, se quedo apoyado en la puerta observándome, Sr...le dije, le importa que repase los bajos del lavabo, no esta bien limpio, dije, mientras me arrodillaba ante sus pies, con mis guantes, frote las imaginarias gotas, que habían en el suelo, a lo que él , me sujeto la cara con una mano, intentando con la otra que me levantase del piso, pero yo insistí, Sr...No deseo una queja en mi turno de trabajo!!! Como desees, me respondió.

Regrese, a posicionarme de rodillas, ante él, mientras.... frote el suelo, sus zapatos, su pantalón, con mis guantes inmaculados, él...erguido, miraba mi culo, mis bragas tras el lazo del mandil y mis botas de látex.., bonitas vistas, que uniforme mas curioso y picante, lleváis en este hotel, musito, tengo que volver a alojarme a mi vuelta por Gijón, risas.........Disculpe le conteste. Tiene una manchita en su pantalón, el tamaño de su miembro, se insinuaba tras esté.
Sujetando mi coleta, tiro de ella y me hizo alzar la cabeza, para besar mi boca salvajemente, me escupió dentro de ella , a la par, que con su mano libre, bajaba la cremallera, sacando su monumental miembro erecto e introduciéndolo en mi boca, logre hacerle, una garganta muy profunda ¡¡¡Chupa cabrona!!! Hazme una limpieza de bajos, grito imperioso. Si, Sr... Asentí con mi cabeza, saco su miembro de mi boca, con vehemencia e intensidad, exclamo ¿No te oigo puta, que vas a limpiarme, para que te he llamado?...respondí...Estoy aquí, para hacerle una limpieza de bajos, Sr.

Bien... veo que lo has entendido, lo que pase en esta habitación, se queda aquí zorra, me encantas nena. Llene de nuevo, con su miembro mi boca y haciendo un gesto con mi mano, dirigí su mirada a través del cristal del lavabo, mi sensual mamada, era buscada por sus ojos, encontrándose con los míos al reflejo del cristal, mi boca estaba sedienta de su ser.....el grosor era considerable y muy apetecible, deleite mi lengua, succionando, ensalivando cada centímetro de él, sus huevos, eran como bolsas de te, cargados de esencia para mi....ummmmmmmmmmmmmmm.
Los alce y pase la punta de mi lengua por su escroto, umm, ceñí sus bolsas de te... en mi boca, los succione, los ensalive, Diossss, que gusto me daba.

Sus piernas, ya flaqueaban ante mi, así que, me retiro su miembro, no sin antes, volver a escupirme en ella.
Se coloco tras de mi, mientras me ordenaba, ven aquí, al lado de la bañera, en cuadrupedia, le alcance la toalla, que había dejado antes y la coloco en el suelo, para que me pusiera sobre ella, se sentó en el taburete y cogió el mango de la ducha, ¿Que va a hacer, Sr.? pregunte.

¡¡¡Calla zorrita, quiero mojar tu coñito!!! El agua, se deslizaba por mis nalgas, calando la poca tela de mis braguitas, goteando sobre mis botas de látex…¡¡¡Como me pones, que culo, que coño, que botas!!!, repetía. Con mis agujeros ya húmedos, dejo el mango de la ducha y me introduce tres dedos, de golpe. Ohhhhhhhhh emití en tono sutil, ¿Te gusta zorra?, suave replique Sr.

Me pones y no voy a tener piedad contigo, hoy mando yo. Otro dedo en mi culo metió, tras explorarlo, me hizo lamerlos, a la par, que él... también lo hacia.
Tras saborear sus dedos, dio protagonismo a su lengua, entre mis piernas, exploro cada rincón, cada agujero, cada centímetro de mí.

Se puso de pie y me levanto del suelo, sus brazos me cogieron a horcajadas y colocándose delante del espejo, contemplo mi culo, bien abierto. Mojo sus dedos en el lavabo, empalándome con ellos... Me llevo a la cama y me coloco sobre ella, sin sacar sus dedos, empezó a lamer mi clítoris, con largas pasadas desde mi dulce agujero; a mi dulce golosina, una, dos, tres, cuatro veces, succiono y mordisqueo mi clítoris con sus labios y dientes, ohhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhh, increíble, Sr....que lengua tiene, confesé ¡¡¡Que coñito tienes Alba, que gusto para mis sentidos, el tenerte así!!!....exclamo.

Tras saciar su boca, me levanto de la cama y me sentó ahora frente al ventanal de la habitación, en un silla de estudio, que estaba ya posicionada, me sentó sobre esta, ahora era él, se encontraba de rodillas ante mi, me sujeto los pies, mientras con su lengua lamia mis fantásticas botas, sus manos enrollaban el látex hasta bajarlas a mis tobillos, besaba mis piernas, tocando su miembro salvajemente ante mis ojos. Sr... Me encanta verlo así, me gusta ver, como se toca su miembro, como se masturba para mí. ¡¡¡Si, zorrita!!!... Eso hago, ponerla bien durita para ti, te la voy a clavar hasta el fondo, ¿Sabes, porque te he sentado aquí?...no Sr.... ¿Porque?, pregunte. Porque quiero, que la gente que pase por la calle nos vea follar. Deseo que admiren tu cuerpo y vean como te follo. Ummm, sonreí, me encanta la idea Sr.

Me quito las botas y con el látex de la perneras de estas, me ato los antebrazo a a los de la silla, el reía a carcajadas, mientras me azotaba con su miembro la boca, chupa, lame, como solo tu sabes nena.
Sus manos, ahora, recorrían mi espalda, jugueteando con los tirantes del uniforme, deslizo la tela del escote, sacando mis pechos, recogía entre sus dedos, los pezones, pellizcando y escupiendo sobre ellos, metió su verga empalmada ¡¡¡Me voy a hacer una cubana, con tus tetazas, golfa....que polvo tienes!!! dijo.
Yo, solo miraba su cara, el mordisqueo de sus labios, su sonrisa malévola, su pasión...Que gusto...Usted, si sabe Sr.. conteste.

Inclino un poco la silla y la recostó sobre la pared, sujetando y alzando mis nalgas, me metió su miembro, de un golpe, moviendo con rapidez su pubis, sus testículos votaban sobre mi culo, dándome un placer inenarrable, casi perdí el sentido, solo deseo que se sacie de mi, Sr....Eso hago, eres mía.....

Jadeante, gritaba… ¿Deseas mi leche, putita? Te la daré en tu cara, no Sr... Eso noooo. ¿Dónde la quieres, sino? En mis tetas, en mis piernas, en mis nalgas, pero en mi cara noooo, conteste y de esta manera, lo hizo. Me marco entera, desde la cara hasta el cuerpo, que fantástica corrida, espectacular, jamás había visto una tan exagerada, ves Alba, estaba bien cargadito para ti, ya te he marcado, he marcado mi territorio, comento. Mientras me besaba apasionadamente, sus manos me desataron, dejando mis manos por fin libres, para acariciar su cara, su cabello, sus labios, su sexo.

Me calce mis botas, una sonrisa dibujada y una mirada sostenida y silenciosa, fue nuestra despedida. Prometí escribir este relato, en homenaje, a mi amigo por mi fantasía lograda, al regalar esta experiencia; dejo plasmado nuestro momento, leeremos este relato, quien sabe, tal vez como un anónimo se lo lee a un amigo y en el recuerdo vivido, solo nosotros sabremos lo que ha pasado, lo que hemos vivido y sentido en nuestra piel.

Con vuestro permiso, dejad que me despida de él, con estas palabras.....Sin tí, no hubiese sido posible, siempre estarás en mi mente, gracias.

Besotes golosos, deseo que os guste, tanto como a mi. Alba - malagueña.




Gracias por deleitarnos una vez más con este maravilloso relato, me ha hecho viajar al pais de las fantasías y estaba viendo ese momento en 3D como si fuera una peli X, tienes un gran don para la escritura, que por cierto para una nalfa como yo me sirve para aprender parabras nuevas jajaja.. las patadas que le meto al diccio! Pues eso, que no dejes de escribir porque me quedo con ganas de más.


Un beso y que grande eres! :)


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