Aquella chica joven que se va a confesar medio llorando y con un gran disgusto: - Padre, mi novio... mi novio es un hijoputa. - Hija, por Dios, esas cosas no se dicen. Mientras tanto, el cura que la ve toda desconsolada le empieza a echar mano, y ella, pues inocente la pobre se deja consolar. - Que ...